Esta bebida alcohólica tan famosa en el mundo entero tiene millones de adeptos. Sin ir más lejos, España es uno de los países del mundo en el que más se consume el famoso zumo de cebada. Ya sea en el aperitivo, de cañas con los amigos o simplemente para comer o cenar, muchas personas son amantes de la cerveza. El verano es la época de mayor consumición.

En 2007, un grupo de amigos de California (Estados Unidos) que estaban tomando unas cervezas en un bar tuvieron una idea: “Tenemos que instaurar un día mundial de la cerveza”. Jesse Avshalomov, Evan Hamilton, Aaron Araki y Richard Hernández lo tenían claro: “Sería bonito homenajear a esta bebida cada año. Es la más famosa del mundo y debe tener un día señalado en el calendario”.

El día de la cerveza se estableció con el objetivo de que este refrescante líquido se convirtiera en el centro de atención de las reuniones de amigos. Además, este grupo de cuatro compañeros de universidad también pretendía homenajear a los fabricantes y a las personas que se dedican a vender y a distribuir la cerveza por todo el mundo.

La cerveza y su éxito mundial

Sin embargo, no fue hasta 2012 cuándo se decidió instaurar el Día Internacional de la Cerveza el primer viernes de agosto. Desde hace una década, cada primer viernes del octavo mes del año, en pleno verano, se celebra mundialmente este día. La cerveza se convierte en la gran protagonista de muchos festivales, reuniones o eventos a lo largo de todo el planeta tierra.

En España, varias ciudades de nuestra geografía tienen previsto realizar diferentes actividades relacionadas con esta milenaria bebida. Desde luego, en muchos hogares españoles y en numerosas reuniones de amigos se beberá más cerveza que nunca. Se celebrará el día de la cerveza y también que muchas personas ya pueden disfrutar de las bien merecidas vacaciones de verano.

Según se ha relatado por diferentes historiadores, la cerveza tiene su origen en Oriente Medio y surgió en Sumeria a partir de un procedimiento para realizar el pan. Los encargados de hacer este alimento descubrieron que, gracias a la levadura empleada en el proceso, se podía obtener también una bebida alcohólica. Lo que no imaginaban es que pudiera llegar a tener tanto éxito.

El método consistía en cocer el pan para, después, humedecerlo con agua. Pasados unos días, la levadura fermentaba y acababa convirtiéndose en una bebida alcohólica. Como bien ha sucedido con muchas otras bebidas o con muchos alimentos a lo largo de la historia, la costumbre se fue extendiendo por todo el mundo hasta convertirse en una tradición milenaria

En un principio, la cerveza se hizo muy famosa en Egipto. Se introdujo en la vida cotidiana como una bebida destinada a las clases más bajas mientras que las clases altas consumían vino. Era una bebida destinada al pueblo y, rápidamente, comenzó a expandirse por todo el Antiguo Egipto.

Posteriormente, la civilización griega y la romana se encargaron de seguir consumiendo cerveza para que, siglos después, llegara hasta Oriente Medio. Su buen sabor y capacidad refrescante llamaba la atención ya que el calor es siempre sofocante en esta parte del mundo. El consumo de cerveza siguió disparado y, años después, esta comenzó a llegar al continente europeo.

Tanto es así que, hoy en día, es la bebida alcohólica más consumida en nuestro continente. Alemania y Bélgica son los dos países con mayor tasa de consumo por habitante y año. En el país germano, fiestas como el ‘Oktoberfest’ están basadas en el consumo masivo de cervezas durante, prácticamente, dos semanas. En España, miles de fiestas patronales o tradicionales también destacan por el alto consumo de cerveza en las mismas.